viernes, agosto 25, 2006

Una extraña canción de amor o una canción de amor extraño: "Nadie detiene el amor en un lugar" de Fito Paez

Existe algo de perturbador en ciertas relaciones de carácter erótico. Y es a veces ese rasgo precísamente el que genera una atracción irresistible.

Como preludio al taller de relato erótico que estaremos dictando en el Centro Cultural Trasnocho, a partir de hoy estaremos publicando algunas canciones que ilustran claramente este otro lado del amor.

¡Salud por las claridades y oscuridades del sentimiento!

Nadie detiene el amor en un lugar*

Ya está bien así
no ves lo que pasó
pensamos que jamás iba a pasar...
Nadie detiene al amor en un lugar
sólo recuerdo tu voz,
pidiendo que acercara aquel metal
sólo quedamos tu y yo en la inmensidad

No podré vivir sin tí, lo sé,
quebrado en una celda en soledad
Nadie detiene al amor en un lugar
Sólo recuerdo tu voz,
pidiendo que golpeara sin piedad
es que nadie detiene al amor en un lugar...

Sobre la madrugada
te até con infinita calma
la mañana disipó las aguas
cuando despertamos no dijiste nada.
Nada, nada, nada,
nada, nada más.

*Fito Paez

(tomado de Vivir es cuestión de método)

Un impulso erótico que no termina en orgasmo: resoluciones alternativas a las tensiones eróticas

El impulso erótico parece tener el camino trazado hacia el encuentro carnal y la descarga del orgasmo. Sin embargo, no es necesaria esta condición para que se encuentre satisfacción en el terreno de lo erótico.

En ocasiones, suelen presentarse casos como la película "La joven del arete de perlas", la cual es profundamente erótica, pero nunca hay ese encuentro que parece inevitable. El impulso va de la sensualidad ingenua de la muchacha, a la sensibilidad artística del pintor (Vermeer) y su ojo atento, al lienzo. Y eros como un elemento perturbador, latente y dominante.

Se trata de otro de los enfoques que estaremos revisando en el taller de relato erótico y, en ese contexto, se enmarca la siguiente canción del cubano Amaury Pérez. Simplemente, orgasmo hecho poesía.

¡Salud!

Hacerte venir

Si yo pudiera llevarte a ocultas donde voy
y regalarte toda la lluvia de un día gris,
enamorarte a media voz
cuando ni el viento me pueda oír,
si yo pudiera de donde estoy...
hacerte venir.

Si yo pudiera hallar lugar y amarte aquí,
desvistiendo las tantas horas de quietud,
guardar lo inmenso de ese olor
a fin de enero ya por vivir,
si yo pudiera de donde estoy...
hacerte venir.

Si yo pudiera ganar la prisa y ver el mar,
delineando la irrealidad de tu existir,
juntar suspiro y soledad
cuando el olvido debe partir.

Si yo pudiera de donde estoy,
ay amor, hacerte venir
para encender la ciudad y el sol
con ademanes de tempestad,
si yo pudiera de donde estoy
ganar la prisa y volver al mar.

Si yo pudiera ahogar la brisa, la humedad,
y proponerme salvar el beso que elegí,
alimentar la claridad de una esperanza,
aun por teñir, si yo pudiera de donde estoy...
hacerte venir.

Si yo pudiera ahogar la sed, la edad,
la voz, reconquistarte
con lo que queda por decir,
unir de un golpe mi ansiedad
y la curva suave de tu sentir.

Si yo pudiera de donde estoy,
ay amor, hacerte venir
no hubiera ardores que violentar,
ni bandoleras que consentir;
si yo pudiera de donde estoy,
ay amor, hacerte venir,
armar de fuego la dignidad,
perder el sitio para fingir.

Si yo pudiera de donde estoy,
ay amor, hacerte venir,
tener tu boca y tu corazón
cuando el deseo me quiera hervir;
si yo pudiera de donde estoy,
ay amor, hacerte venir
si yo pudiera de donde estoy,
ay amor... hacerte venir!

(tomado de Vivir es cuestión de método)

Una visión escatológica del Bloody mary

Otro de los puntos que intentaos abordar en este taller de relato erótico tendrá que ver, por un lado, con la escatología, esa presentación cruda de todos los procesos fisiológicos que implica el acto sexual y, por otra, con lo simbólico dentro del discurso erótico.

En este espíritu el siguiente texto:

"Quien toma un “BLOODY MARY” está, en su subconsciente –como diría Freud-, utilizando la sangre que todos los meses evacuan naturalmente las mujeres y hembras de ciertos animales, echada al vertedero cuando no cumple con su función de parir a un ser vivo.

Vaya donde vaya, los tampones y el cóctel viajan juntos. Si se tomara el ADN de ambos, veríamos que el nombre del “BLOODY MARY” no es una coincidencia.

Cuando en la barra de un bar, cualquier snob –sea hombre o mujer- ordene con voz estentórea un ¡“BLOODY MARY”! sin duda pone en evidencia su complejo de Edipo, pues al nacer todos de madre, atados a ella nos encontramos toda la vida."

(del gusto es mío, publicado en Vivir es cuestión de método)

Un close up sobre el eterno femenino: parlamento de Cristina Peck (Naomi Watts) en "21 gramos"

Siempre me encuentro con una duda personal que también aparece en algunos de los participantes y es qué tanto de lo erótico corresponde al campo meramente sexual o, más específico aún, meramente genital.

Creo que hay espacio para la discusión, sin embargo, considero que lo más interesante del género erótico es ver cómo el acto sexual puede convertirse en el gran desaguadero de las pasiones humanas.

Por eso, antes de una escena o relación sexual de gran intesidad, generalmente existen momentos pasionales que siembran las tensiones de las cuales surgirá el deseo, la piel.

Sirva esto de prólogo al siguiente parlamento de "21 grams"

¡Salud al eterno femenino!

"Why the hell did you tell me
that you liked me?

Answer me, because I didn't
like you saying that at all.

You can't just walk up
to a woman you barely know
and tell her you like her.

You-You can't.
You can't do that.

You don't know
what she's going through.

Or what she's feeling."

(tomado de Vivir es cuestión de método)

Una forma literaria de abordar las pasiones, el deseo y el sexo: taller de relato erótico

Próximamente, los viernes 22 y 29 de septiembre y 6 y 13 de octubre de 5 a 7 pm estaremos dictando un Taller de relato erótico en el Centro Cultural Trasnocho. Será una oportunidad de explorar desde la escritura de ficción esas inquietudes del deseo, de la piel. Este es el blog de trabajo de dicho taller.

Inversión: Bs. 75.000
Duración: 4 sesiones
Viernes 22 y 29 Septiembre, 6 y 13 de Octubre
Horario: 5:00 pm a 7:00 pm
Cupo: 16 participantes


INSCRIPCIONES de lunes a viernes de 2:00 a 6:00pm

Puede inscribirse también depositando en efectivo o cheque en la siguiente cuenta corriente a nombre de Fundación Trasnocho Cultural, Banco Venezolano de Crédito, 0104-0107-1701-0700-5641

NOTA: Una vez hecho el pago deberás enviar vía fax (9939444) la fotocopia del depósito con los datos del participante y el nombre del taller. Espacio Plural. Trasnocho Cultural, C.C. Paseo Las Mercedes. Telf: 9916755

Abajo el programa.

La escritura tiene dos componentes: el talento y lo que podríamos llamar la "artesanía". El primero, por sus características, sólo permite ser orientado, canalizado. Pero la artesanía se aprende al descubrir algunas herramientas básicas, identificándolas en los relatos de otros autores y en los propios y manipulándolas, jugando con ellas. Un taller literario es un ambiente propicio para este proceso. El objetivo de este taller es brindar algunas herramientas básicas, de aplicación práctica para la escritura de relatos cortos eróticos y sensibilizar a los participantes, a través de constantes lecturas de relatos y fragmentos de autores venezolanos y extranjeros, a la lectura de este tipo literatura. Las sesiones comenzarán con una corta exposición teórica, se procederá a una discusión grupal. Se tratarán cuatro temáticas: ¿Cómo surge un relato erótico? La trama y la estructura del relato erótico. Los personajes en el relato erótico. La escena en el relato erótico.